Melvin Udall es un escritor huraño que padece de un trastorno obsesivo-compulsivo. Apegado a su rutina, Melvin come diariamente en al misma cafetería donde es atendido por la camarera Carol. Pese a que disfruta molestarlo con sus comentarios homofóbicos, cuando su vecino Simon sufre una grave agresión, Melvin acepta cuidar de su perro Verdell, comenzando a mostrar imprevistos cambios en su carácter.
Entre las comedias dramáticas más destacadas de la década del 90, podemos encontrarnos con una tan típicamente atípica como "As Good As It Gets".
Llevada adelante por un trío con personalidades completamente desiguales, la historia se construye sobre ellos, se destruye en sus problemas y se vuelve a reconstruir con las decisiones que toman sin dejar de ser fieles a su esencia.
Encabezando este particular triángulo, Jack Nicholson brinda uno de sus personajes más memorables al interpretar a ese escritor tan odioso como auténtico, que sería una total pesadilla para cualquier vecino pero que a su vez termina siendo un leal aliado.
En la piel de esa camarera y madre soltera, Helent Hunt se muestra a la altura siendo un complemento ideal para conformar el romance; mientras que Greg Kinnear no desentona como ese artista agredido y sin inspiración que introduce a otra pieza fundamental del film: el encantador Verdell.
De la mano de estos tres personajes llenos de imperfecciones pero siempre consecuentes con ellos mismos, Mel Brooks dirige esta comedia que nos deja frases imposibles de olvidar, además de hilarantes momentos humorísticos que la hacen una película indispensable de visionar.
9.0/10
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