Sam viaja por el desierto de Mojave intentando encontrar clientes, aunque nadie lo atiende en sus casas y ni siquiera su mujer le responde el teléfono. Sin comprender la situación y completamente solo, Sam encuentra compañía en un programa de radio que advierte sobre un asesino de niños prófugo. A partir de ese momento, Sam comienza a ser perseguido por cualquier persona que se encuentra en su camino.
Escapando de la verosimilitud para sumergir al espectador en una odisea desértica que roza el surrealismo, "Sam Was Here" es una nada trascendental, pero sí interesante propuesta.
Esta es una película para ver sin pedirle coherencia ya que no la tiene, y ese probablemente sea un detalle que a muchos les haga odiarla al igual que a su ambigua conclusión.
Viendo sus aspectos positivos, el director maneja con un pulso firme los continuos giros argumentales, el protagonista realiza una actuación sólida, la fotografía ayuda a lograr el clima y hay algunos detalles bizarros que llaman la atención.
Como contrapunto, la falta de coherencia juega en contra varias veces y la sensación de estar parado en el mismo lugar no se desvanece, aunque si se aceptan estos detalles, "Sam Was Here" se convierte en una curiosa película de tintes oníricos.
6.0/10
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