Valerian y la ciudad de los mil planetas (2017)

Siglo XXVIII. Alpha se ha convertido en una metrópolis en constante expansión que alberga miles de especies de todo el universo. Cuando una extraña raza amenaza con terminar con la paz en la Ciudad de los Mil Planetas, el mayor Valerian y la sargento Laureline deberán resolver el problema para controlar el peligro y así mantener el orden en el universo.

Cumpliéndose 40 años de la aparición de uno de los cómics europeos más representativos de la historia, Luc Besson se pone tras las cámaras para adaptar esta compleja historieta en una película de poco más de dos horas.

Con un presupuesto que oscila entre los 177 y 209 millones de dólares, Besson construyó una superproducción visualmente espectacular y con mucho entretenimiento, pero también varias fallas que le impiden alcanzar un estatus superior.

Una de ellas es tan notable que no hay nada que se pueda hacer para disimularla y dicha falla son sus dos protagonistas, ambos una errónea elección y no sólo por la escasa química que demuestran entre sí.

Dane DeHann es un gran actor pero carece del carisma que Valerian necesita; Cara Delevigne ya demostró en "Suicide Squad" que está muy lejos de ser una buena actriz, así que no sorprende su irregular interpretación de un personaje con tantas matices como Laureline.

Dejando de lado el mayor problema del film y no evitando mencionar los agujeros argumentales, donde sí "Valerian and the City of a Thousand Planets" triunfa es en la puesta visual.

Besson construyó una metrópolis fascinante donde cada ciudad está detallada con una característica propia, resultando todas ellas un regalo para la vista.

Con semejante presupuesto sería un crimen que no fuera así, no obstante, el director se encarga de construir una aventura espacial que desde la perspectiva visual es digna del cómic del que precede.

La amplia variedad de especies extraterrestres es otro condimento para que los ojos del espectador puedan degustar, y dentro de tantas razas podemos destacar personajes secundarios mucho más simpáticos que los protagonistas (los tres patos, Bubble/Rihanna).

"Valerian and the City of a Thousand Planets" es una experiencia que vale la pena ser vivida en la gran pantalla ya que visualmente es impecable y como aventura tiene cierto encanto, aunque no deja de ser una pena que con tanta perfección visual/técnica se haya descuidado el guión y elegido dos actores inadecuados para tan representativos papeles.

7.5/10