Al tomar un desvío en la carretera, los protagonistas de un reality show y el equipo técnico terminan llegando al pueblo de Pleasant Valley. Lo que ellos desconocen es que los pueblerinos los estaban esperando deseosos de incluirlos en el menú del día.
Entregando una divertida carnicería a manos de un grupo de sureños maníacos, "2001 Maniacs" fue un remake que cumplió con las expectativas necesarias para rehacer una icónica película del cine gore.
Cinco años después, Tim Sullivan decidió que los desquiciados de Pleasant Valley debían continuar con sus barbacoas y "2001 Maniacs: Field of Screams" fue el resultado.
Sin dejar de utilizar la palabra matanza, hay que decir que esta secuela es justamente eso: una auténtica masacre de todo lo bueno que tenía el film de 2005.
Por alguna razón incomprensible, Sullivan optó por una irritante exageración de cada uno de las fortalezas previas y lejos de funcionar arruinó por completo esta continuación.
Hay alguna que otra muerte rescatable aunque el bajo presupuesto es notorio (algo que se disimulaba en su predecesora), y los actores no compensan sus terribles interpretaciones ni siquiera con los grotescos decesos que tienen, insuficientes para salvar esta secuela que condenó a los maníacos de Pleasant Valley al olvido.
3.3/10
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