Ataque a los Titanes (2015)

Con la civilización obligada a vivir detrás de enormes muros por los gigantes caníbales que exterminaron a la mayoría de los humanos, escuadrones especialmente entrenados se preparan para combatir a las sanguinarias criaturas antes de que acaben con el resto de los sobrevivientes.

Entre los animes más aclamados de los últimos años, nos encontramos con uno extremadamente brutal como "Attack on Titan".

Ante la enorme repercusión de la serie, no es de extrañar que se haya decidido realizar su live action para llevar a la gran pantalla a los Titanes caníbales.

Muchas veces se critica a las adaptaciones norteamericanas de animes japoneses por la escasa fidelidad y los innecesarios cambios que se realizan respecto a la versión original, "Attack on Titan" nos demuestra que en Japón no están exentos de cometer los mismos -garrafales- errores.

Modificando sin sentido alguno la historia, este live action es un desastre argumentalmente hablando, no explica nada sobre los monstruos, ni los muros y pierde la carga dramática que caracterizaba al anime, el cual conseguía ilustrar el sufrimiento de la manera más gráfica y dolorosa.

Los personajes son otro desastre, algunos importantes ni siquiera aparecen, los que sí tienen una personalidad diferente en el peor sentido de la palabra (lo que hacen con Mikasa, en el anime una implacable guerrera con una frialdad asesina pero de enorme vulnerabilidad emocional, es argumentalmente criminal).

Intentando dejar de lado el caos narrativo, donde esta adaptación consigue impactar es en una de las pocas cosas que conserva de la serie: la extrema brutalidad de los Titanes.

Los gigantes caníbales conservan ese aspecto grotesco que los hace atemorizantes a simple vista, su despiadado accionar nos entrega muertes donde las vísceras literalmente vuelan hacia el espectador, no faltan los desmembramientos y hasta sale (poco más de un minuto) el Titán Colosal.

Únicamente por sus deformes criaturas gigantes, "Attack on Titan" es un live action que se puede ver (resultará más llevadero para quien no haya visto el anime), aunque no pasa de ser otra adaptación que modifica las bases de las que proviene para tomar un rumbo innecesario que a partir de sus errores no hace más que elevar el nivel de la serie japonesa.

6.0/10