Custodia compartida (2017)

Myriam y Antoine Besson se divorcian, ella solicita la custodia de su hijo Julien alegando hechos de violencia, él sostiene que son mentiras de su ex esposa. Al ser determinada la custodia compartida, Julien queda en medio del conflicto entre sus padres mientras el rencor y el miedo en ellos va creciendo.

Divorciarse de un hombre que te maltrata ya es un hecho traumático, tener que seguir viéndolo por tener hijos en común una tortura psicológica a la que no hay opción más que la de acostumbrarse. Sufrir su constante acecho temiendo por lo que te puede hacer transforma la vida de la mujer en un calvario del que sabe no puede escapar.

"Custodia compartida" ("Jusqu'à la garde" en su idioma original) aborda esta prisión diaria de la que son presas miles de mujeres, mostrando además el padecer de los hijos de la pareja.

Iniciando con una secuencia judicial que deja en claro qué rol jugará cada uno en la historia, la película no genera ni un segundo la duda de quién dice la verdad: ella es la víctima y él el victimario (pese a que la jueza no acaba de creerlo).

No sorprende entonces las actitudes que el padre toma con el hijo, su constante hostilidad, las mentiras de la madre para evitarle sufrimiento bajo su custodia y la necesidad de huir siempre de alguien que sabe podría explotar en cualquier instante y de la peor manera.

Xavier Legrand narra con precisión los hechos de violencia, pero lamentablemente alarga en exceso ciertas situaciones, pierde el interés por momentos e incluso se acerca hacia el aburrimiento.

Eso sí, los minutos finales son dignos de una película de terror, estremecedores, desesperantes, ilustrativos del real sufrimiento y el peligro que una víctima de violencia de género atraviesa en manos de su propio monstruo.

6.5/10