Megalodón (2018)

Investigando el fondo del océano, los tripulantes de un submarino son atacados por una misteriosa criatura que avería el transporte. Con una inminente catástrofe amenazando a los tripulantes, el Dr. Chang acude a Jonas Taylor, un especialista en rescates submarinos, quien acepta comandar la misión. Una vez en las profundidades, Jonas descubre a la criatura detrás del ataque: un megalodón de 23 metros más letal que cualquier animal marino alguna vez descubierto.

Estamos acostumbrados a encontrarnos cada tanto con alguna película de tiburones, la mayoría de ellas de bajo presupuesto, escasa calidad pero innegable diversión.

No existen, sin embargo, precedentes de una superproducción de escualos ya que los riesgos no son pocos, hasta el momento y a excepción de "El espantatiburones" que es una propuesta infantil, la más costosa era "Alerta en lo profundo" con un presupuesto de 60 millones.

Naciendo de una coproducción entre Estados Unidos y China, "The Meg" es una aventurada pero siempre genérica película de millonario costo, pero un espíritu tan de serie B como la mayoría de esta clase de films.

¿Qué significa esto? Que "The Meg" no decepciona al brindar una historia sobre un tiburón asesino de desproporcionado tamaño, menos sangrienta de lo esperado, pero tan entretenida y espectacular como los 130 millones que costó se lo permitían.

Jason Statham interpreta al típico héroe irrompible que debe hacerle frente al gigantesco Meg, no deslumbra aunque cumple con lo justo. El resto de los personajes no es más que relleno (carnada en el caso de varios).

Se nota que se censuraron muchos momentos para obtener una clasificación que le permita llegar a un público más amplio, no faltan las muertes pero la brutalidad está contenida.

Cierto es también que se pierden varios minutos con conversaciones intrascendentes que tratan de llevar la historia hacia un rumbo serio que no le queda, sin embargo, cuando se abraza sin vergüenza el ridículo todo cambia y es ahí que se alcanzan los momentos de mayor entretenimiento.

Ideal para todo aquel que le gusten las películas de tiburones o de monstruos gigantes, "The Meg" es una superproducción menos inspirada y sangrienta de lo que debería, pero tan entretenida y espectacular como el gigantesco megalodón habilitaba.

7.3/10