Páginas

miércoles, 3 de octubre de 2018

El Depredador (2018)

Una nave espacial aterriza en medio del bosque trayendo un letal extraterrestre que ha venido de caza. Genéticamente modificado para ser más implacable que sus versiones anteriores, el Depredador inicia una matanza donde nadie estará a salvo. Únicamente un grupo de inestables soldados y una bióloga podrán hacerle frente al extraterrestre, para así evitar que su cacería humana continúe.

Cuarta entrega (sexta contando los dos spin-off donde se enfrenta a Alien) de la franquicia del emblemático extraterrestre nacido en 1987 e inmortalizado por su persecución selvática a Arnold Schwarzenegger.
Intentando darle un giro a la saga, Shane Black se pone tras las cámaras para dirigir "The Predator", consiguiendo un híbrido mucho más curioso que el propio alienígena evolucionado.

Curioso puede significar algo tan bueno como malo, en este caso no es ninguna de las dos y a su vez es ambas; muchos la disfrutarán, aunque es probable que los fanáticos de la saga la odien y la consideren una deshonra.
No es descabellado decir que el largometraje parece la unión de dos distintos ya que la primera media hora parece mantener el estilo de las anteriores entregas, pero desde que ese grupo de soldados entra en escena y Olivia Munn agarra una portentosa arma, la tonalidad adquirida es digna de la filmografía de Black.

Los Depredadores desatan una auténtica carnicería que deja como resultado la muerte de incontables personas, incluso algunas contienen una brutalidad bastante extrema que es de agradecer ya que permiten mostrar al extraterrestre como el letal cazador que es.
Cierto es que el exceso de humor distorsiona el resultado, hay momentos muy efectivos que sacan varias risas, otros, sin embargo, son demasiado ridículos y no cuadran con la tonalidad de la saga.

La historia del chico con síndrome de Asperger no tiene el menor sentido ni siquiera con un actor tan competente como Jacob Tremblay, y ni hablar de las incoherencias argumentales indisimulables (muchas perdonables por la diversión, otras no ya que desvirtúan el concepto original).
Haciendo un balance de sus virtudes y defectos, "The Predator" es una película argumentalmente caótica y muy lejana al nivel de la entrega iniciadora o la secuela de 2010, pero a su vez no deja de ser una brutal y descerebradamente entretenida secuela donde el extraterrestre vuelve a lucirse con una nueva cacería.

6.6/10

3 comentarios:

  1. Menuda basura! donde quedo el predator del 87 o de las secuelas? este tan solo hace uso d su nombre y no merece esta pelicula ser llamada parte de la saga.

    ResponderBorrar
  2. Ha de ser la peor de las peliculs del depredador junto con las que pelea contra alien

    ResponderBorrar
  3. Me gustaron el diseño del depredadorr alfa, no así la película que dejó mucho que desear.

    ResponderBorrar