Al no poder superar la pérdida de su pequeño hijo, Maria entra en un pozo depresivo que le impide seguir adelante. Cuando recibe la posibilidad de despedirse de su hijo a través de un ritual en una puerta que conecta con el otro mundo, la mujer comete el error de abrirla liberando así al espíritu que ya no es el hijo que amó y que irá tras ella y su familia.
Teniendo la novedad de estar ambientada en India y de beber de ciertos rituales espirituales de dicho país, "The Other Side of the Door" es una típica película de fantasmas más.
Con un inicio prometedor que hace hincapié en el aspecto depresivo por el que la protagonista atraviesa, la atmósfera opresiva se combina con la dramática con cierta eficacia.
Pero a partir de que la puerta -a la que el título del film hace referencia- es abierta, con el espíritu maligno del niño ingresan todos los clichés esperados y todo atractivo argumental es extraviado.
Esto causa que la historia peque de previsible y su desenlace no sorprenda, aunque a favor hay algún que otro susto logrado y el maquillaje de ese demonio que se arrastra está muy logrado.
"The Other Side of the Door" es una trillada película de fantasmas que carece de toda originalidad posible, pero que al menos e incluso con sus varias irregularidades, cumple con lo básico que una propuesta de este estilo debe brindar.
5.2/10
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