1999, Buenos Aires. Benjamín Espósito, un agente judicial retirado, decide escribir una novela basándose en un asesinato ocurrido en 1974 que marcó su vida. Reviviendo el caso que lo obsesionó durante años, la figura de la mujer que amó en silencio todo ese tiempo también resurge haciéndole ver la importancia que significa para su vida resolver el homicidio.
Consiguiendo el hito de ser la segunda película argentina en ganar el Oscar a Mejor Película Extranjera, "El secreto de sus ojos" se convirtió en una de las películas bisagra del cine nacional.
Con una impecable ambientación de época, la historia se presenta como una drama policial combinado con tintes de intriga e incluso románticos que contienen una notable profundidad que le brinda una identidad única.
Juan José Campanella dirige con un pulso firme y una acertada precisión, creando secuencias sublimes como la tan comentada escena en la cancha de Racing.
Los actores son otro inmejorable acierto, todos están adecuados en sus papeles, destacándose un Ricardo Darín más sólido que nunca, Guillermo Francella en un papel distinto a los que suele interpretar pero igual de correcto, y una Soledad Villamil que es la sorpresa y la encargada de llevar adelante un romance tan bien narrado, tan poco explicitado y con un envidiable encanto.
Desembocando en un final que resuelve con contundencia las dos tramas principales, "El Secreto De Sus Ojos" se consolida como una de las películas más importantes de los últimos tiempos del cine argentino, y un claro ejemplo de que la producción nacional puede alcanzar una calidad digna de Hollywood cuando hay talento y una historia interesante sobre la cual construirse.
8.6/10
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