"Don't Hang Up" es una de esas películas que presenta un cambio de roles al convertir a los victimarios en víctimas.
Si bien tenemos mucha producciones que hacen lo mismo, es innegable que el recurso no pierde vigencia y en este caso se aplica con eficacia.
Los dos protagonistas representan a los típicos adolescentes obsesionados con tener fama virtual a cualquier costo y como tal resultan absolutamente odiosos, no obstante, el sádico hombre del otro lado del teléfono nos brinda placer al encargarse de despojarlos de la impunidad que suponían tener.
Tal vez la crítica hacia esta moda queda desdibujada al lado de las torturas y los varios clichés tampoco colaboran para elevarla, de todas maneras, dichos defectos no impiden que "Don't Hang Up" se conforme como un thriller bastante aceptable.
6.1/10
No hay comentarios.:
Publicar un comentario