Halloween (2018)

Han pasado 40 años de la noche en la que Michael Myers asesinó cinco personas y desde entonces ha permanecido recluido en un hospital psiquiátrico sin decir una palabra. Traumatizada por los recuerdos de ese Halloween donde casi es asesinada por Myers, Laurie Strode dedica su vida a prepararse para una posible confrontación. Cuando Michael consigue escapar, los residentes de Haddonfield son acechados por el sanguinario asesino al que únicamente Laurie podrá detener en un enfrentamiento que esperó cuatro décadas.

A finales de los años 70 en una época donde el subgénero slasher comenzaba a presentarse, "Halloween" se estrenó para convertirse de inmediato en uno de los mayores estandartes de la historia del cine de terror.

El tiempo pasó y las secuelas aparecieron periódicamente en los siguientes años hasta totalizar una franquicia compuesta por ocho entregas que finalizó recién en 2002, teniendo un reinicio en 2007 donde Rom Zombie cubrió de gloria a Michael Myers, para apenas dos años más tarde enterrarlo por culpa de una infame secuela que estuvo cerca de acabar con el asesino de la Noche de Brujas.

Dentro de un Hollywood que cada vez apuesta más por los productos que funcionaron en el pasado, este año le tocó el turno de regresa a la emblemática saga a través de una continuación directa de la original que ignora todo lo ocurrido luego del film de 1978.

El retorno de Michael no podría haber sido más satisfactorio, "Halloween" es un slasher a la antigua pero adaptado a los tiempos modernos, reúne todo lo que hizo memorable a su predecesora pero no se queda en un simple homenaje, se convierte en una película de terror con identidad propia.

Aplicando un manto ochentero sobre el que la historia se cubre de comienzo a fin, David Gordon Green construye una secuela que evoca el estilo de John Carpenter pero curiosamente lo combina con la brutalidad que Rob Zombie aplicó en el remake.

Dicha mezcla da como resultado un Michael Myers implacable, un auténtico Boogeyman que aterroriza a los residentes de Haddonfield como hace 40 años, una brutal máquina de matar que utiliza la violencia más extrema con sus víctimas.

Para enfrentarse a un icono del género de tanto peso que mejor que una de las scream queens más representativas, una Jamie Lee Curtis que cuatro décadas más tarde vuelve a brillar con el personaje que la catapultó a la fama.

Curtis entrega una Laurie traumatizada por aquella Noche de Brujas, alcohólica y con serios problemas con su hija que muestran su lado más vulnerable, pero también fuerte, combativa y decidida a ponerle fin a "la forma" que la acecha desde hace tanto tiempo.

Cada confrontación entre Michael y Laurie es un regalo para los fanáticos de la franquicia, la música original sonando de fondo y la constante tensión que se respira contribuyen a generar una sensación equivalente a aquella primera vez 40 años atrás.

"Halloween" es una impecable secuela que funciona a su vez como el reboot más bienvenido que la saga podría tener; Michael Myers no puede morir, eso ya lo sabemos, pero con este regreso demuestra que está más vivo que nunca y en planea forma para seguir validando su leyenda durante un largo tiempo más.

9.1/10