Billy observa cómo sus padres son asesinados por un hombre con traje de Santa Claus. Años más tarde, el niño ha crecido con una voz en su cabeza que lo guía para ponerse el traje y asesinar en vísperas de la Navidad a aquellos que han sido malos.
41 años después de aquel slasher que presentaba a un desquiciado vestido de Santa Claus cometiendo asesinatos, llega su (segunda) remake para oficiar una sangrienta Navidad.
Muy lejos del nivel de la original pero no tan alejada de la (más que decente) reversión de 2012, "Silent Night, Deadly Night" es una producción que cumple con brindar lo que uno puede esperarse de ella.
Un Santa Claus asesino y muchas muertes son su mayor carta y lo que la mayoria esperábamos de ella, sangre hay mucha pese a que creatividad poca.
Billy, quien en el film de 1984 era un desquiciado que cometía crímenes motivado por el trauma de ver a sus padres siendo asesinados por un tipo vestido de Santa Claus, es ahora una especie de justiciero con un espíritu en su cabeza (muy a lo "Venom") que únicamente mata gente mala.
Admito que en un comienzo me resultó chocante esta modificación, pero con el desarrollo de la historia se vuelve interesante y le da una personalidad a la película que seguramente no hubiese tenido copiando todo lo de la original.
Sin muchas pretensiones y claramente sin el objetivo de quedar inmortalizada como la obra que reversiona, "Silent Night, Deadly Night" es un slasher bien construido ideal para quienes busquen una sangrienta historia de terror navideño.
7.3/10
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