Popeye (1980)

Popeye, un marinero solitario, llega a un pequeño pueblo costero buscando a su padre. Allí conoce a Olivia, una refinada mujer que está comprometida con Brutus, el hombre más temido del lugar contra el que se enfrentará por el amor de ella.

Desde su aparición gráfica en 1929, Popeye El Marino se convirtió en un personaje que se inmortalizó en posteriores cortometrajes y series de TV.

Mucho antes de que sea algo natural adaptar series al cine, en 1980 se intentó con este dibujo y a través de una fallida película que poco y nada tiene de memorable.

Con una historia sin gracia que no le hace honor al espíritu de la serie, tampoco ayuda mucho los insulsos musicales o las actuaciones (ni siquiera se salva Robin Williams en la pie de Popeye).

Intentando rescatar algo, la ambientación es aceptable, los vestuarios de los personajes son lo más fiel a la serie y hay algún que otro gag levemente simpático.

Sin mucho más para agregar, "Popeye" es una película intrascendente que no está a la altura de la serie del marinero, quien claramente merecería una nueva oportunidad en la gran pantalla.

4.2/10