Abril de 1945. Con la Segunda Guerra Mundial llegando a su fin, el Sargento Collier y su equipo se trasladan por Europa a bordo del tanque "Fury", buscando asegurar lineas enemigas, protegiendo a sus compatriotas y acabando con los nazis.
Llegando como una de las tantas superproducciones bélicas hollywoodenses más, "Fury" es una sólida película que se diferencia de todas las demás por un detalle trascendental que la hace destacable: su tanque.
Dicho tanque que da título al nombre del film es el principal motivo por el cual esta es una propuesta imperdible para todo aquel afín al cine bélico, ya que debe ser una de las pocas que transcurre casi en su totalidad dentro de la imponente máquina de guerra.
Ese es una enorme acierto de su director, que a través del "Fury" nos muestra -explícitamente y sin ahorrarse las aristas más atroces- las consecuencias que dejó la Segunda Guerra Mundial.
Gracias al brutal realismo que se intenta conseguir, el auténtico horror que significa la guerra se puede sentir en su plenitud a bordo de esa tanque, que dicho sea de paso, protagoniza secuencias de acción espectaculares (la batalla contra el super-tanque alemán roza lo épico).
Lamentablemente y lejos de estar a la altura de su impecable puesta en escena, el guión tiene agujeros gigantescos que traicionan el mensaje que en un comienzo se quería dar, y ese mensaje es que en la guerra no hay héroes: los asesinos son asesinos y las víctimas son víctimas, americanos o nazis, sin importar de que bando.
Es una pena que esto ocurra porque el director ilustró -hasta los 20 minutos finales- a los protagonistas como auténticos combatientes sin sentimientos que gozan asesinando y se vanaglorian a sí mismos por eso, algo que se pierde en el desenlace donde la "redención" hace su aparición y no faltan las innecesarias citas bíblicas y el discurso patriótico en boca de un Brad Pitt al que le quedan a la perfección esta clase de papeles.
Dañada por ese difuso mensaje y sus varios errores argumentales que le impiden ser una obra maestra del cine bélico, "Fury" es una película que probablemente no quedará grabada en la historia del cine, pero que sí será recordada dentro del género por su cruda violencia y sobre todo por ese impactante tanque de guerra que brinda escenas difíciles de olvidar.
7.6/10
es la mejor película bélica que he visto en años, en este momento solo la ubicaría detras de salvar al soldado ryan
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