Tras una misión fallida donde pierde un cargamento de plutonio, la CIA toma las riendas del caso y Ethan Hunt es obligado a trabajar con el agente Walker. Reuniendo a su equipo de confianza, Hunt deberá encontrar al plutonio antes de que un letal plan se ejecute.
22 son los años que pasaron desde aquella primera "Mission Impossible" que consolidó a Tom Cruise como uno de los héroes de acción más taquilleros de Hollywood, iniciando una franquicia que ha sabido renovarse entrega a entrega sin dejar de mantenerse fiel a su estilo.
Llegar a una sexta parte manteniendo el interés no es sencillo, mucho menos lo es entregando una historia que consiga sorprender y entretener por igual, pero "Fallout" ha conseguido ambas.
No es que se diferencia de cualquier película de espías o se aleje del terreno donde la saga habita, sin embargo, presenta una historia desarrollada con todos los elementos necesarios para gustar a los apasionados a esta clase de films.
Tal vez el conflicto sea algo trillado, pero contiene intriga, traiciones, giros imprevistos (y algunos no tanto) y una agilidad constante que te mantiene atrapado a los hechos.
Las secuencias de acción no abundan en cantidades, pero las que hay son una absoluta delicia visual: la persecución motociclística, la confrontación en el baño y el vibrante desenlace con helicópteros incluidos entregan instantes de un espectacularidad artesanal digna de ser aplaudida en un Hollywood donde se prioriza el CGI y la pantalla verde.
Tom Cruise puede ser un personaje cuestionable por su afiliación a la cienciología y tampoco está cerca de ser merecedor de un Oscar, pero como héroe de acción nadie puede cuestionarlo ya que es un titán, continuar filmando escenas tan arriesgadas sin recurrir a dobles de riesgos con 56 años es sencillamente loable.
Cierto es que tiene un equipo que lo acompaña a la perfección, ninguno de sus aliados desentona y todos tienen su destaque sin opacar a Cruise. Algo convencional es el personaje de Henry Cavill que no aporta mucho más que un obstáculo ocasional, pero tampoco es que representa un mayor problema.
Que una franquicia de 22 años tenga una salud tan estable teniendo más de dos décadas de vida no es algo común, pero con esta sexta entrega Tom Cruise demuestra que "Mission Impossible" goza de una vitalidad envidiable, un notable talento implicado tanto delante como detrás de cámaras y potencia de sobra para que las aventuras de Ethan Hunt no tengan fecha de vencimiento.
8.2/10
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