martes, 18 de febrero de 2014

Balada De Un Hombre Común (2013)

1961, Nueva York. Llewyn Davis es un cantante de folk que se gana la vida cantando en distintos bares a cambio de unos pocos dólares. Sin un lugar fijo para vivir, pasa el frío invierno durmiendo en los sillones de varios amigos. Decidido a triunfar, Llewyn decide viajar a Chicago para buscar a Bud Grossman, un magnate de la música con el que espera tener su gran oportunidad.

Tres años después de su última película, la aclamada "Tru Grit", los hermanos Cohen dejan el western detrás para retornar con esta comedia dramática, más dramática que cómica, titulada originalmente "Inside Llewyn Davis".

Lejos de los films que nos cuentan la historia de algún cantante que viene de abajo y gracias a su talento al final termina triunfando, lo que acá se trata de contar es todo lo contrario: el protagonista arranca siendo un perdedor y termina exactamente igual que al comienzo, siendo un perdedor.
Por ese lado, es un acierto que los directores se centren en un personaje al que el éxito le es esquivo y que tiene una vida bastante caótica por su manera de ser, situándolo en un viaje en busca de la gran oportunidad que siempre deseó y en donde se cruza con una galería de estrafalarios personajes (algunos de los cuales no tienen desperdicio).

Es una pena que dotando a varios de ellos con personalidades tan distintivas, los Cohen fallen a la hora de diagramar a su protagonista. Teniendo primordialmente todo para que simpaticemos con él (sus fracasos constantes con la música, sus frustradas relaciones sentimentales/familiares y especialmente ese encantador gato que es todo un acierto) Llewyn se convierte con el pasar de los minutos en un personaje chocante, tanto que al final terminás alegrándote de sus fracasos más que sintiendo pena.
Con un protagonista con el cual es imposible empatizar, se hace difícil disfrutar la película por completo, y el ritmo lento que se alcanza en ciertos momentos es otro impedimento que la condiciona de volverse una obra memorable como sí lo son otras producciones de sus directores, que acá lograron realizar un film donde la calidad sobra pero el sentimiento escasea.

6.6/10

1 comentario:

  1. No considero que se una película lenta sino pausada, el viaje de Llewin se narra con los silencios y descansos necesarios para que su historia pueda llegar a contarse como debe ser, amén de que es un pobre diablo que nunca triunfará, relegado a ser un segundón, aplausos para los cohen por esta película empapada de la realidad del hombre promedio.

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