Cabrini Green es un barrio en el que desde hace décadas flota la leyenda sobre un asesino con un garfio el cual puede ser convocado diciendo su nombre cinco veces frente al espejo. Con el lugar reformado y la mayoría de las antiguas viviendas donde tragedias ocurrieron derrumbadas, un pintor en busca de inspiración se interesa por la leyenda adentrándose cada vez más en ella sin saber que traerá a Candyman de regreso.
Siendo una de las películas de terror que destacó en los años 90, "Candyman" inició una franquicia que llegaría a su fin en 1999 con una intrascendente tercera parte que pasó con más pena que gloria.
Con la carrera cinematográfica del fantasma asesino -que convirtió a Tony Todd en un icono del género- aparentemente finalizada, tuvieron que pasar 22 años para que Candyman regresara en esta película que es tanto una secuela como un reboot.
Secuela ya que si bien no se profundiza en los hechos de la original tampoco se los ignora y (rejuvenecimiento digital de por medio) Todd tiene una breve pero contundente aparición que sirve como vinculación directa con el film de 1992.
Reboot ya que se inicia una historia independiente con nuevos protagonistas y un enfoque centrado en la problemática racial, tema que se conecta directamente con el regreso de Candyman a Cabrini Green.
Pese a que la dirección es de una eficaz Nia DaCosta que acierta en combinar el racismo con la leyenda del fantasma generando un sostenido equilibrio condimentado con sangre, el enfoque de la película es claramente de uno de sus guionistas y productores, Jordan Peele.
No es menor invocar su nombre ya que el responsable de hits como "Get Out" y "Us" es uno de los cineastas afroamericanos más importantes del Hollywood actual y su influencia en esta historia es notable, por lo cual aquellos a quienes no les gustaron los dos films previamente aludidos seguramente se decepcionen con esta nueva entrega.
Es cierto que es algo exagerado que las víctimas de Candyman sean únicamente blancas, pero si conseguimos obviar ese detalle tampoco está mal el trasfondo para elevar la crudeza del racismo.
Actuaciones correctas, estética cuidada, una banda sonora que no desentona y varias muertes complementan a "Candyman" como un reinicio muy logrado para el fantasma del garfio que vuelve a estar tan presente como en la década de los 90.
8.0/10
La original tiene el mismo discurso. No más "leve", pero los productos de hoy subestiman al público y, al parecer con razón. El terror es alegórico y si se lo explicas al lector o espectador, como instrucciones de shampoo, pierde el sentido. En resumen, Jordan Peele hace lo mismo que Barker, pero mal. Igual hace falta entender intenciones y formas de discurso, por eso luego sacan mensajes que no existen de expresiones artísticas.
ResponderBorrarConvirtieron la película en "blancos=maldad" y se nota que Candyman sólo elimina blancos y le echan la culpa a los blancos de todo lo malo que le pasa a los morenos. Es racismo a la inversa.
ResponderBorrarCandyman (1992) es una de las mejores películas de terror de todos los tiempos segun yo, tenia miedo de lo que iban a hacer con esta pelicula nueva pero no me disgusto para nada, todo lo contrario, creo que supieron mantener muy bien el legado de candyman
ResponderBorrarMe hubiese gustado que salga mas Tony Todd ya que el siempre será Candyman, el comienzo y la masacre policial del final fueron mis momentos predilectos.
ResponderBorrarCon Candyman y hace unos años con Halloween han demostrado que en efecto se pueden revivir de manera exitosa las franquicias que tanto amamos, y no solo eso, sino que aparte les brindan una nueva gloria, ahora esta generación conocerá los horrores que a nosotros tanto nos fascinaban y aun nos fascinan, y de ese modo los clásicos por fin podrán resurgir una vez mas.
ResponderBorrarMuy buena, mejor de lo que me esperaba debo decir
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